– Día del Hombre.
Autor: Juan Diego Betancur Arias
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La violencia, desde esta reflexión, se entiende a partir de la desigualdad social sobre la cual se encuentran organizados hombres, mujeres, roles, funciones y mandatos de género. Este último concepto alude a los roles impuestos a hombres y mujeres por la sociedad, la cultura, la familia, los grupos sociales, la tecnología, la educación ortodoxa y las religiones.
Para el hombre se han declarado funciones, atributos y roles que cada vez discrepan más significativamente con lo que realmente es, pues las generaciones han venido transformándose en las últimas tres décadas y más.
Los hombres que han venido educándose a lo largo de su vida en sistemas patriarcales, experimentan en tiempos hipermodernos el denominado conflicto de género masculino, que ocasiona problemas en su conducta, en su actividad consciente, en el desarrollo de su personalidad, situaciones relacionadas con el alcoholismo, la dependencia a sustancias psicoactivas, entre otras adicciones químicas y no químicas. Al mismo tiempo, la desestructuración emocional y otros problemas vinculados con la salud mental, refieren que el hombre, al igual que la mujer, es susceptible a la violencia a causa de la desigualdad en los modos, formas y maneras de expresar, vivenciar y direccionar las experiencias vitales en un sistema patriarcal hegemónico. Este tipo de violencias, por ejemplo, se presentan a menudo en las relaciones de pareja.
Así las cosas, los mandatos de género masculinos se convierten en los gatilladores principales para dar génesis a un círculo de violencias en contra del hombre; sobre las cuales existe una naturalización, por no tratarse del maltrato físico, la fuerza y los elementos que caracterizan y materializan la violencia en contra de la mujer, que es la más estudiada científicamente y sobre la cual existen procesos, programas y políticas que buscan mitigarla, reducirla o abolirla. En el caso del hombre, es muy poco probable que el maltrato físico o la fuerza signen el tipo de violencia, aunque, se presentan casos donde es notable y es una estrategia recurrente de la mujer en el estilo de afrontamiento a los problemas que se presentan en la relación de pareja.
El primer nivel del círculo de violencia de género que se logra identificar en contra del hombre, se denomina microviolencia, obedece a los comportamientos «normales» que ejerce la mujer para reclamar sobre las expectativas instaladas en los mandatos de género masculinos, un hombre fuerte, alfa, dominante, trabajador, sexual, entre otros atributos. Todo aquello que se salga de este parámetro es susceptible de cuestionarse y de generar una desigualdad, que aunque aparentemente no se ve, está.
El segundo nivel tiene que ver con la violencia manifiesta, que se expresa de manera indiscriminada, no hay control de impulsos y se representa en maltrato verbal y psicológico en cualquier momento o lugar. Este segundo nivel es influido por el primero y por una colección de emociones negativas en la mujer. Acá la violencia es percibida por otros, sale de la línea soterrada y se nota como un problema de gran importancia por la agresión y la violencia hacia el hombre.
El tercer nivel del círculo es la violencia extrema hacia el hombre por su masculinidad descentralizada de los modelos patriarcales hegemónicos o por ser hombres que responden de manera literal a estos mandatos. Este nivel se ha empezado a reconocer como viricidio, y se sitúa en el contexto de que la mujer u otro género que logre configurar un círculo de violencia como el que se menciona en el contexto de una relación sentimental o de pareja, tiene la probabilidad de acabar con la vida del hombre.
Este es un fenómeno percibido con gran extrañeza en nuestra cultura, pues nadie dimensiona que en una sociedad patriarcal se elimine al hombre por pensar, comportarse y poseer el universo emocional que lo caracteriza.
Entonces, a partir de esta reflexión, vale concluir que la masculinidad no ha de asumirse de manera rígida, inflexible o a partir de mandatos de género desactualizados de las nuevas masculinidades que comprenden un hombre sensible, empático y vulnerable.
Nota legal:
StockSnap. (09 de agosto de 2017). Guy-hombre-personas-oscuro-sombra [Imagen de Pixabay]. https://pixabay.com/es/photos/guy-hombre-personas-oscuro-sombra-2617866/
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Betancur Arias, J. D. (19 de marzo de 2021). El viricidio, un tipo de violencia extrema hacia el hombre relacionada con los mandatos de género y lo «normal». Blog Fondo Editorial Universidad Católica Luis Amigó. https://editorialluisamigo.home.blog/2021/03/19/el-viricidio-un-tipo-de-violencia-extrema-hacia-el-hombre-relacionada-con-los-mandatos-de-genero-y-lo-normal/