Formar a los estudiantes universitarios en investigación: ¿por qué, para qué y cómo?

Autora: Luisa Fernanda Córdoba Quintero

Correo electrónico: asis.feditorial@amigo.edu.co

Estamos al “filo de la oportunidad”; eso decía la misión de los sabios para Colombia en 1996. Este comité asesor en estrategias de educación, ciencia, tecnología e innovación planteaba alternativas en distintas esferas sociales, pero ¿qué nos hacía falta entonces para obtenerla?

En cuanto a educación, lo que nos faltaba era contundente: «Las condiciones están dadas como nunca para el cambio social, y (…) la educación será su órgano maestro. Una educación (…) inconforme y reflexiva, que nos inspire un nuevo modo de pensar y nos incite a descubrir quiénes somos” (García Márquez, 1996, p. 29).

Las palabras de uno de los escritores más famosos del País no dan cabida para la duda. Nos faltaba y nos sigue faltando avanzar en procesos educativos que, mediante la formación en investigación, nos ayuden a pensar(nos), a ser reflexivos, críticos y propositivos.

¿Por qué?

El desarrollo de la investigación en Colombia aun es incipiente. Así nos lo hace ver Betancur Arias (2018), en su capítulo “La investigación formativa como una oportunidad para generar reflexiones académicas acerca de los conocimientos científicos. Contextos y realidades” publicado en el libro Situaciones y retos de la investigación en Latinoamérica y editado por el Fondo Editorial de la Universidad Católica Luis Amigó.

Este docente universitario hace hincapié en que los recursos destinados para apoyar la investigación siguen siendo escasos, más aún si se tiene en cuenta que es determinante la formación de los estudiantes en este aspecto, principalmente de los que acceden a la educación superior, porque como futuros profesionales tendrán el reto de aportar a la solución de las problemáticas sociales contemporáneas de su país, su región o incluso, de cada una de sus comunidades.

¿Para qué?

Aunque han existido transformaciones en el desarrollo de los procesos educativos, en sus modelos pedagógicos, didácticas, estrategias de enseñanza y de evaluación, nos sigue faltando mucho trecho. Los estudiantes están inquietos por el conocimiento y para guiarlos por este camino es válido apalancarse en uno de los impulsos básicos y naturales con que nacemos: las ganas de explorar el mundo.

Sujetarse de la premisa anterior para formar a los estudiantes universitarios en investigación tiene varios propósitos, entre ellos, diría Betancur Arias (2018): favorecer la competitividad profesional; desarrollar habilidades que permitan una mejor inserción en los mercados laborales, aumentar la conciencia crítica y reflexiva; construir una cultura investigativa sólida en los entornos académicos y, de manera especial, mejorar la calidad de la educación superior.

¿Cómo?

Se trata de promover en el estudiante “un aprendizaje por comprensión, constructivo, basado en problemas, explorador, diverso, metódico, riguroso y tecnológico (…), que lo aproximen a las lógicas del conocimiento, para ir formando, desde la reflexión, nociones atinadas en relación con [su uso]” (Betancur Arias, 2018, p. 286). Se requiere generar ambientes educativos que permitan la construcción de experiencias:

El aula de clase, un semillero de investigación, los grupos de investigación, la tutoría personalizada a un estudiante, un debate, un círculo de reflexión o estudio, entre otros escenarios educativos, sirven para construir experiencias entorno a la investigación formativa. Son espacios en los que el estudiante, acompañado de su docente o mentor, podría empezar a explorar asuntos distintos a los contenidos programáticos de una asignatura [negrillas añadidas]

(Betancur Arias, 2018, p. 286).

Para ilustrar estos escenarios, el autor describe algunas estrategias a las cuales suma las metodologías activas del aprendizaje: 1) aprendizaje basado en problemas; 2) aprendizaje basado en casos; 3) aprendizaje basado en proyectos; y 4) aprendizaje con mediación de TIC, todas estas “centran la responsabilidad en el estudiante, quien en últimas termina por construir los aprendizajes” (Betancur Arias, 2018, p. 290). También resulta clave la intervención del docente, puesto que

es necesario que desarrolle primero en él, las competencias necesarias que estimulen el pensamiento desde todos sus niveles de estructuración, lo cual permitirá acercarse a la realidad, observarla, leerla, analizarla, interpretarla e intervenirla, y de esta manera podrá aportar a sus estudiantes las herramientas necesarias para que ellos hagan lo mismo

(Betancur Arias, 2018, p. 293).

Reflexiones como la de Betancur Arias (2018), que tratan sobre la pertinencia de un tema subvalorado y que aún genera escepticismo en los entornos educativos, permiten concluir que si aún no llegamos a la oportunidad, tampoco la hemos perdido. Es importante que docentes, estudiantes e instituciones continúen en el camino, es decir, buscando incansablemente alternativas y estrategias para la formación de mejores personas y profesionales más preparados para intervenir la sociedad que habitan. 

Referencias:

García Márquez, G. (1996). La proclama por un país al alcance de los niños. En Colombia al filo de la oportunidad. Misión ciencia, educación y desarrollo (Tomo I). Tercer mundo editores. http://www.plandecenal.edu.co/cms/media/herramientas/colombia_al_filo_de_la_oportunidad.pdf

Betancur Arias, J. D. (2018). La investigación formativa como una oportunidad para generar reflexiones académicas acerca de los conocimientos científicos. Contextos y realidades. En P. A. Montoya Zuluaga, y S. N. Cogollo Ospina (Comps.). Situaciones y retos de la investigación en Latinoamérica. (pp. 282-296). Fondo Editorial Universidad Católica Luis Amigó. https://www.funlam.edu.co/uploads/fondoeditorial/407_Situaciones_y_retos_de_la_investigacion_en_Latinoamerica.pdf

Nota legal

Startup Sotck Photos. (28 de septiembre de 2015). Foto/complejo-complicado-concepto-confundido [Imagen de Pexels]. https://www.pexels.com/es-es/foto/complejo-complicado-concepto-confundido-212286/

El contenido de esta publicación se deriva del capítulo “La investigación formativa como una oportunidad para generar reflexiones académicas acerca de los conocimientos científicos. Contextos y realidades”, escrito por Juan Diego Betancur Arias y publicado en el libro Situaciones y retos de la investigación en Latinoamérica, en 2018, por el Fondo Editorial Universidad Católica Luis Amigó. Puede leerse y descargarse en https://www.funlam.edu.co/uploads/fondoeditorial/407_Situaciones_y_retos_de_la_investigacion_en_Latinoamerica.pdf

Cómo citar este texto siguiendo las indicaciones de la séptima edición de APA

Córdoba-Quintero, L. F. (7 de agosto de 2020). Formar a los estudiantes universitarios en investigación: ¿por qué, para qué y cómo? Blog Fondo Editorial Universidad Católica Luis Amigó. https://editorialluisamigo.home.blog/2020/08/07/formar-a-los-estudiantes-universitarios-en-investigacion-por-que-para-que-y-como/

Un comentario

  1. Atento saludo,

    Una reflexión valiosa y pertinente la que se propone a partir de este tema. La investigación formativa ayudará para que los estudiantes y docentes, conformen redes de investigación que tengan impacto y aporten a la solución de problemáticas sociales, académicas y empresariales.

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